20 de febrero de 2012

bueno, descubrí que mi blog se convirtió en un manual de autoayuda.

17 de febrero de 2012

as time goes by

de repente hace cinco años que tengo este blog. viste cuando te caen esas fichas? uh, hace siete años que no veo a esa piba de la primaria que era 're amiga'. uh hace tres meses que no hablo con mi viejo. esas cosas de la vida que uno se empeña en medir con el tiempo. esas cosas que no significan nada y a la vez lo son todo. esas que hicieron que seas quien sos hoy. esas cosas que te hacen pensar, 'che, loco, mirá todo lo que maduré, mirá todo lo que pasé, y aún estoy acá de pie'. y no podés evitar preguntarte 'estarán bien las cosas que hago?'.
lo que está bien hecho y lo que está mal hecho son relativos, porque nadie va a ver objetivamente nada de lo que hayas hecho. vos tenés tu idea y yo tengo la mia y si somos personas decentes cada uno va a defender su propia moral hasta la muerte si es necesario. por otro lado, el hombre es un animal egocéntrico de por sí, jamás se pondrá en el lugar del otro, aunque intente fervientemente hacerlo. siempre va a estar ese dejo de criticismo, de subjetividad. depende de uno darle bola y caer o mantenerse de pie, defendiéndose.

11 de febrero de 2012

"él debe ser la música que nunca hiciste"

desde el miércoles que no puedo escucharlo. me niego. estuve sin mirar tele porque a cada rato lo pasaban en algún recital. porque si bien mi adolescencia todavía no termina, él la marcó mucho. de hecho me ayudó a crecer (él y otros más). y decirle chau a él, a aquella persona mágica que todos deseamos haber conocido, es decirle chau a una parte de mi adolescencia, decirle chau a banda de recuerdos.
hoy decidí escuchar artaud (ese que yo siempre creí que era el mejor disco nacional junto con bang bang estás liquidado). voy a mi caja que tiene todos mis cds. agarró ese verde y amarillo. y cuando lo abro está vacío. yo no puedo explicar cómo me alteré. me puse a llorar (porque ese cd significa mucho para mí, entre otras cosas es mi regalo de quince). y empecé a abrir uno por uno todos los cds que poseo. empecé por los de él, invisible, pescado, almendra, y sus amigos. y no hubo suerte. y seguí abriendo mgmt, george harrison, fito, charly, sui, calamaro y no, no aparecía. finalmente llegué a los de los beatles. abrí el álbum blanco y no. abrí sgt peppers, abbey road, let it be y no. y llego a rubber soul. mi cd preferido. lo abro y veo que tiene dos cds, y ahí estaba, aquel compacto que quiere ser vinilo. y fue increíble. y me di cuenta entonces que él está donde tiene que estar, con sir john y con sir george.

7 de febrero de 2012

not like the movies

cosas que aprender: dejar de vivir en el pasado.
la vida cambia, las situaciones cambian, las personas cambian. todo cambia. y supongo que aunque mi pasado fue muchísimo mejor que mi ahora y lo que antes era familiar para mí hoy ya no lo reconozco, voy a creer lo que siempre dije: las cosas pasan por algo. las casualidades no existen, ni tampoco lo imposible. si bien uno se siente cómodo pensando que no hay una cosa como el destino manejándonos, yo pienso que el libre albedrío es un concepto que limita a la libertad misma. no voy a decir que creo que hay algo ahí que tiene toda mi vida escrita e incluso mi defunción, pero sí algo. yo cuando era chiquita vi una película, no me acuerdo cuál que trataba sobre el destino y como era imposible que el futuro de la persona cambiara una vez que ya se había dictado , no recuerdo el nombre ni exactamente de qué trataba, pero no viene al caso... después de ver esa película me construí este mundo, donde el destino sí, existe, pero no de la forma en que la tragedia griega te lo hace ver, irreversible e imposible de modificar. si no que me vi al destino como una hojita borrador. esa que usás para hacer las cuentas boludas de matemática pero que no entregás. y yo me imaginaba que en esa hojita estaban escritos ciertos puntos de la vida, no toda, sino aquellos momentos que podrían crear encrucijadas. ponele, bien de película melosa, aceptar el trabajo de tus sueños o quedarte con el amor de tu vida. ese momento de encrucijada está escrito en tinta y es inborrable. en un momento llegás a ese punto sí o sí. pero después de ese lugar salen dos flechitas, una que es la vida que vivís si elegís el laburo u otra que vivís si elegís al tipo. eso está escrito en lápiz y uno mismo lo hace inborrable al momento de la decisión.
y es al día de hoy, ponele que diez años después de ver esa película, sigo creyendo lo mismo.
uno no hace su propia vida, sino sus elecciones. y ahí entra el concepto de libre albedrío, pero ¿hasta cuándo es el libre albedrío tal? si la vida te da solo dos opciones cuando podrías tener muchas más, ¿no seguís estando limitado por la vida misma o el destino o lo que sea?